“Puede sonar a tópico, pero Fran tiene un ojo especial. Detrás de las grandes historias siempre hay otras que, no tan grandes, tienen mucho que contar. Con mucha paciencia y un cariño arduo sobre el mundo de la fotografía, Fran es esa persona que va más allá. A través de la mirilla de su cámara, habla sobre un reflejo, una sombra que deja entrever una silueta y detalles que, a ojos de otros, pueden parecen ilusorios. La inspiración de Fran rebosa de referencias culturales, en el mundo del cine, de la fotografía, la música y las artes en general. En lo superficial, Fran aprende de los grandes. Aunque en realidad, siempre bebió de los pinceles y las acuarelas de su casa. Fran no solo se comunica con la imagen sino también es nativo en italiano y español, además de dominar con fluidez el inglés y el francés. Durante tres años fue opositor y, aunque fue, es y será una persona diplomática, la vocación es la vocación. No puede soltar el dedo del disparador.”